"Facturas lokísimas"

Uno de los servicios que llevamos a cabo en Energética es el de comparativas de facturas: cualquier persona interesada puede mandarnos una factura para saber si salimos más caros o más baratos que las otras comercializadoras; desde aquí hacemos las cuentas y preparamos un informe sin compromiso. En los dos últimos años, con un mercado eléctrico convulso donde hemos visto precios diarios de más de 400 euros por MWh en el mercado mayorista, la factura de la luz ha subido muchísimo y nuestras comparativas desfavorables, con precios más altos que la competencia, fueron el año pasado casi la mitad de las que hicimos. Esta es una de las estrategias del oligopolio: cuando el precio alto de la luz es noticia en los telediarios, aprovechan su posición de dominio para poner tarifas por debajo del coste en el mercado y así deshacerse de las pequeñas empresas como la nuestra.

Pero cuando las tornas cambian y la luz es noticia en los telediarios por su bajada de precio, es cuando viene la sorpresa: las grandes eléctricas aprovechan la información de que la luz es más barata (lo que no es del todo cierto) para poner a sus clientes unas tarifas desmesuradas convencidos de que serán pocas personas las que se paren a mirarlo. Desde enero, con dos bajadas de nuestras tarifas, nos estamos encontrando con unas facturas increíblemente altas de la competencia y las comparativas en las que salimos mejor son ya el 64%. Para guardarlas, en el equipo técnico hemos creado una carpeta que se llama «Facturas lokísimas»: la última incorporación a este podio del despropósito energético es la que ilustra esta noticia porque jamás habíamos visto algo parecido: una factura un 115 %, 51,11 € frente a los 23,68 € que habría pagado con Energética.

Y es que esta factura lo tiene todo: un término de potencia caro, unas tarifas del término de energía desorbitadas, un seguro y un servicio de asistencia al hogar innecesarios…  Y sobre todo tiene el ingrediente principal del oligopolio energético: el interés más descarnado de obtener beneficios económicos obscenos dejando de lado el de las personas. En Energética creemos que las cooperativas tenemos que estar al servicio de nuestros y nuestras cooperativistas y por eso buscamos las mejores condiciones, también las económicas, para los servicios que ofrecemos. Porque compromiso, economía social y sostenibilidad no están reñidas con el ahorro económico.

Esta historia tiene un final feliz: la protagonista del atraco a mano armada que ilustra esta noticia ya está del lado bueno de la energía. Pero a tu alrededor seguro que hay personas que siguen creyendo que ser de una cooperativa es más caro: ¡ayúdales a descubrir que es justo al revés!

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